Hígado guisado

De pequeña, mi madre preparaba hígado encebollado por lo menos una vez por semana y a mí me encantaba.

Ahora, ya mayor, se me hace pesado y no solía comerlo muy a menudo, porque luego me estaba repitiendo todo el día.

Al pasar por el súper vi que tenían y se me antojó.

Ya en casa, como tenía verduras disponibles, se me ocurrió hacerlo guisado a ver si así no se me hacía tan pesado...

No sólo no se me hizo pesado, sino que me ha encantado preparado de esta manera.

Ingredientes para 5 raciones:

- 1 kg de hígado de cordero en filetes

- 1 cebolla

- 1 cabeza de ajos

- 1 pimiento rojo

- 600 gr de tomates de rama escaldados, pelados y triturados

- 1 vaso generoso de vino blanco

- 3 patatas medianas

- Sal y pimienta

Preparación:

1)- Pochamos la cebolla y el pimiento rojo picados junto con los ajos laminados.

2)- Cuando la cebolla se transparente, agregamos el hígado salpimentado y dejamos que tome color.

3)- Añadimos el tomate, salpimentamos y regamos con el vino.

4)- Añadimos las patatas peladas y cortadas en dados, tapados y dejamos cocinar unos 30 minutos, removiendo de cuando en cuando.

5)- Si queremos una salsa más espesa, podemos chascar las patatas en lugar de cortarlas.

6)- Servimos.

* Como siempre os digo, si vais a congelar, hacedlo sin las patatas. Siempre podéis asar o freír unos dados de patata y añadirlos al calentar el plato.

* Es importante que los tomates sean maduros, para que suelten una mayor cantidad de jugo... pues éste junto con el vino serán la única fuente de líquido para guisar el hígado y las patatas.

Si no encontráis tomates maduros, siempre podéis añadir un poco de agua o caldo.